El atletismo es un deporte en crisis y necesita desesperadamente nuevos héroes para emerger de los Juegos Olímpicos tras el incesante ataque por casos de dopaje positivos, que ha virtualmente destruido su credibilidad.
John Fahey, presidente de la Agencia Mundial Anti Dopaje (WADA, por su sigla en inglés) advirtió la semana pasada que el público podría desertar en las pruebas de atletismo para siempre si el dopaje no se erradica.
"Sino nosotros estamos moralmente quebrados y diciendo a nuestros hijos: si quieren ser exitosos, tomen pastillas, sino no podrán," dijo.
"Si no lo hacemos, entonces parte del mundo que hemos conocido en nuestra vida desaparecerá," aseguró.
Fahey identificó a los 100 metros, una carrera asolada por el dopaje desde la espectacular caída de Ben Johnson 20 años atrás, como la llave para restaurar la confianza.
Con el campeón de Atenas 2004 Justin Gatlin sumándose a la larga lista negra de dopajes positivos y la campeona de Sidey 2000 Marion Jones en prisión, la confianza pública en la prueba está en lo más bajo.
Además, la aparición del nadador multipremiado, Michael Phelps, que acaparó la atención del público olímpico, hizo que Lamine Diack, presidente de la Asociación Internacional de Federaciones de Atletismo (IAAF, por su sigla en inglés), esté de acuerdo en que su deporte necesita de forma urgente encontrar nuevos héroes.
"Tenemos algunos atletas magníficos, jóvenes que pueden hacer cosas excepcionales," dijo el martes Diack. "Necesitamos demostrar qué maravilloso deporte es el atletismo," aseguró.
A principios de este año la IAAF anunció que había contratado a una agencia de publicidad para trabajar en el mejoramiento de la imagen del deporte y que los funcionarios han estado preocupados durante años por su posición en el centro de la escena en los Juegos.
Sebastián Coe, bicampeón olímpico en 1.500 metros, vicepresidente de la IAAF y director de los Juegos de Londres 2012, ha advertido largamente que es necesario actuar en este tema.
Cinco años atrás ayudó a lanzar una campaña de "búsqueda de héroes" lamentando que Hicham El Guerrouj quien fuera posiblemente el mejor corredor de media distancia de todos los tiempos, fuera desconocido en el patio de las escuelas de Europa y América.
Todavía preocupado, Coe dice que los atletas necesitan reenergizarse en todo el mundo.
"Necesitamos capturar la imaginación de aquellos que siguen este deporte y alargar la mano hacia la próxima generación," asegura.
A pesar de ser el país dominante en este deporte, Estados Unidos siempre ha luchado por encontrar un público local pero sigue segundo en la lista de preferencias, con tendencia declinante.
El velocista estadounidense Tyson Gay, tricampeón mundial, y una de las grandes figuras en Pekín dijo esta semana estar sorprendido que Kobe Bryant, el jugador mejor pagado de la NBA lo reconociera en la Villa Olímpica.
Sin embargo, no todo está tan mal, el enfrentamiento de Gay con los jamaiquinos Usain Bolt y Asafa Powell en los 100 metros serán suficientes para enardecer al público y el saltador de vallas Liu Xiang es un héroe en China.
Pero parece que el futuro del deporte depende menos de cuánto más rápido corran ellos que de cuán rápido queden limpios en los controles antidopajes.
Mitch Phillips
miércoles, 13 de agosto de 2008
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